Las lagunas altiplánicas Miscanti y Miñiques son de aquellos tesoros naturales que nos da el desierto y que nos hacen sentir en otra dimensión. La composición poética del paisaje mezcla los cerros reflejados en las lagunas que se encuentran junto a la tierra de este valle adornado por piedras rojas, pastos secos amarillentos y agua turquesa.